La Diputación de León, como institución impulsora de la candidatura, celebra que la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) haya concedido al Sistema Agrosilvopastoril Montañas de León el reconocimiento como Sistema Importante del Patrimonio Agrícola Mundial (SIPAM), máxima distinción que identifica espacios únicos que destacan por sus valores paisajísticos, agronómicos, culturales y antropológicos.
El territorio leonés ha sido reconocido junto a otros cuatro territorios ubicados en China, México, Marruecos y Tailandia en el marco de una reunión celebrada esta semana en Roma apenas unos días después de que el Programa SIPAM, nacido en la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Sostenible celebrada en Johannesburgo en 2002, haya celebrado su vigésimo aniversario.
El Sistema de Patrimonio Agrícola de Importancia Mundial (SIPAM) implica no solo paisajes naturales singulares, sino también prácticas agrícolas que generan medios de vida en las zonas rurales y que combinan biodiversidad, ecosistemas resilientes y tradición e innovación de una manera única.
A diferencia de los otros SIPAM, caracterizados por ser espacios reducidos basados en una única producción agroalimentaria, en el caso de Montañas de León se trata de una amplia extensión de 10.000 kilómetros cuadrados -el tercero más extenso del mundo- con aprovechamiento simultáneo agrícola, ganadero y forestal. Se da la singularidad de que la montaña leonesa alberga más de una tercera parte del único Parque Nacional habitado de España (Picos de Europa) y siete espacios catalogados como reservas de la biosfera: Picos de Europa, Alto Bernesga, Los Ancares Leoneses, Babia, Los Argüellos, Valle de Laciana y Valles de Omaña y Luna.
De acuerdo al jurado, este sistema agroalimentario polivalente de las Montañas de León, en el noroeste de España, “ha contribuido durante siglos de forma directa a la seguridad alimentaria y al sustento de las comunidades locales”. Además, abunda el comité, “la zona alberga una notable diversidad de usos del suelo con bosques (castañales, hayedos, abedules, enebros, robledales), pastos y zonas de cultivo. Esto permite la coexistencia de la agricultura, la ganadería, la silvicultura, la recolección, la caza y la pesca en un mismo espacio, dotando a la zona de un gran valor agroecológico”.
La FAO ha considerado que “en medio de la singularidad de la Sierra de León, la capacidad de sus habitantes para domesticar, mantener y adaptar la biodiversidad agrícola se ha traducido en la conservación y salvaguarda de especies autóctonas únicas como el Gallo Pardo y el Indio de León, que necesita un entorno muy específico para su reproducción; la especie bovina Mantequera Leonesa, apreciada por sus productos lácteos y el distintivo caballo Hispano-Bretón”. “La belleza y el reconocimiento que también brindan las siete Reservas de la Biosfera que conviven aquí en armonía directa con los sistemas agrícolas hace que la combinación de atributos sea difícil de encontrar en otras partes del mundo”, destaca de la candidatura.
El presidente de la Diputación de León, Eduardo Morán, el subdelegado del Gobierno, Faustino Sánchez, y la Universidad de León, junto al equipo humano que ha trabajado en la candidatura, valorarán esta semana en rueda de prensa las oportunidades que este reconocimiento mundial brinda a la provincia.
Con la incorporación de las Montañas de León, España suma cinco SIPAM y es el tercer país con mayor número, tras China y Japón. Hasta ahora estaban reconocidos el Valle Salado de Araña (Álava), el cultivo de la uva pasa en La Axarquía (Málaga), los olivos milenarios del Territorio Sénia (Tarragona, Teruel y Castellón) y el sistema de riego histórico de la huerta de Valencia. La FAO tiene reconocidos 72 sistemas de patrimonio agrícola repartidos en 23 países.